CONFIANZA EN LA PRUEBA



El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién podré temer?
El Señor es la fortaleza de mi vida,
¿ante quién puedo temblar?
Cuando me asaltan los criminales
para destrozarme,
son ellos, mis opresores y enemigos,
los que tropiezan y sucumben.
Aunque un ejército acampe contra mí,
mi corazón no teme;
aunque una guerra estalle contra mí,
estoy tranquilo.
Una cosa pido al Señor, sólo eso busco:
habitar en la casa del Señor todos los días de mi vida
para gustar la dulzura del Señor
y contemplar la belleza de su templo.
Él me dará cobijo el día de la desgracias.
me esconderá en lo oculto de su tienda,
me subirá a lo alto de la roca;
así mi cabeza dominará a los enemigos
que me cercan,
en su tienda podré ofrecer sacrificios
entre aclamaciones,
cantando y ensalzando al Señor.
Escucha, Señor, mi grito suplicante,
ten compasión de mí, respóndeme.
De ti mi corazón me ha dicho: "Busca su rostro";
es tu rostro, Señor, lo que yo busco;
no me ocultes tu rostro,
no rechaces con cólera a tu siervo;
tú eres mi auxilio, no me abandones,
no me dejes, oh Dios, salvador mío.
Mi padre y mi madre me han abandonado,
y el Señor me ha recogido.
Enséñame, Señor, tus sendas
y guíame por el camino recto,
pues me están acechando;
no me entregues al capricho de mis perseguidores,
pues se han alzado contra mí testigos falsos
que respiran violencia.
Yo estoy seguro que he de ver los bienes del Señor
en el mundo de los vivos.
Espera en el Señor, ten ánimo,
sé fuerte, espera en el Señor.









RECUERDA, JESÚS ES EL BUEN PASTOR :
"El señor es mi pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace reposar, me conduce hacia las aguas del remanso y conforta mi alma........"
Salmo 23

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